Pep Guardiola es un magnífico entrenador. Decir lo contrario sería cometer pecado de lesa majestad. Pero conviene recordar que con la plantilla que dirige está obligado a ganar todos los torneos en los que participa. Los propietarios del Manchester City son más ricos que Creso. De modo que se pueden permitir el lujo de fichar a futbolistas repletos de cualidades para competir al más alto nivel. Listón que pone el equipo merengue cuando le toca jugar partidos correspondientes a la UEFA Champions League.
El partido principió con un público bramando contra Vinicius Juniórs por lo ocurrido con 'El Balón de Oro' ganado por Rodri. Según dicen los comentaristas y cronistas del acontecimiento. Pero uno está convencido de que el extremo brasileño es maltratado a voz en cuello porque su juego causa tanto miedo entre sus rivales como en los seguidores de los clubes que se enfrentan al equipo dirigido por Carlo Ancelotti. Y le zurran la badana a fin de intimidarlo para que pierda el oremus y por consiguiente no dé la talla de gran jugador que es. Error grave. Puesto que los insultos a Vinicius le sirven de estimulante.
Carlo Ancelotti cuenta con varios jugadores que pueden actuar orillados a las bandas. Verbigracia: el ya reseñado Vinicius, Rodrygo, Brahim Diaz, Lucas Vázquez y hasta Valverde cumplen misiones concretas en esa posición. Últimamente, Dani Ceballos 'vale lo mismo para un roto que para un descosido'. Dicho como algo positivo. Es decir, se suma a labores de centrocampista por un costado. Ayer cometió un error grave por su talante impulsivo. Me refiero al penalti que le hizo a Foden. Y que sirvió para que Haaland marcara su segundo tanto en el minuto 79. El buen jugador utrerano debe evitar su excesiva fogosidad.
Resumiendo: El Madrid puede jugar bajo el sistema 4-3-3 porque tiene jugadores extraordinarios para interpretar ese dibujo. Y además es ideal si en cualquier momento lo transforma en un 4-4-2. Sin necesidad de cambiar de intérpretes. Ah, a medida que pasan los días estamos asistiendo al magnífico rendimiento de Jude Bellingham y Kylian Mbappé. Ambos fueron ayer piezas destacadas de un once que logró desquiciar al mejor equipo de la Premier League.
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