El gol de Endrick en el Estadio Municipal de Anoeta vale un Potosí

Cuando muchos espectadores estaban aún buscando sus asientos en el Reale Arena de San Sebastián, Endrick marcó el gol del Madrid en una jugada vertiginosa. Tanto que a la postre le daría la victoria. La cual le permitirá al equipo blanco afrontar el encuentro de vuelta de las semifinales de la Copa del Rey con una ventaja que debe servirle para jugar sin prisa pero sin pausa en el Bernabéu. Cabe destacar el pase de Jude Bellingham al delantero brasileño al espacio libre y que desbordó a los defensores del equipo guipuzcoano. No me cansaré de repetir que el jugador inglés ha caído de pie en un Madrid donde no es nada fácil llegar y besar el santo. 

El tanto obtenido por Endrick le sentó como un jarro de agua fría al equipo dirigido por ese buen entrenador que es Imanol Alguacil. Pero bien pronto los jugadores donostiarras decidieron atacar sin solución de continuidad. Pero se encontraron con un Lunin que es capaz de mostrar su confianza cuando le toca sustituir a Thibaut Courtois. Mención especial merece Asencio. Cuyas actuaciones notables son dignas de encomio porque las lleva a cabo en medio de un ambiente crispado contra su persona. Por motivos más que aireados. Es decir, que el joven futbolista 'está puesto en la picota'. O sea...

Carlo Ancelotti ha decidido, según estamos viendo, darle a Vinicius una misión distinta a la que venía cumpliendo como extremo orillado a la banda izquierda. Debido a su velocidad sin balón y también conduciendo la pelota y driblando a sus oponentes. Así que lleva varios partidos actuando por dentro. Es decir, haciendo el trabajo de interior para aprovechar los desbarajustes que su presencia provoca entre el central y el lateral de ese costado. También cabe apreciar el bien que puede hacerle a la estrella brasileña sentirse más responsable que nunca al lucir el brazalete de capitán del Madrid. Casi nada... En suma, el tiempo dirá si Vinicius Juniór es también capaz de evitar que los árbitros no lo miren de mala manera. Es decir...