Real Madrid y Sevilla Club de Fútbol jugaron un gran partido

Todo comenzó con un homenaje a Jesús Navas. Extraordinario futbolista que ha decidido retirarse cuando todavía está en condiciones de seguir jugando lo que queda de temporada y aún más. Y el público del Bernabéu aclamó al nacido en Los Palacios como si se hubiese criado en Valdebebas y hubiera vestido la camiseta blanca durante tantos años como lo ha hecho en el Sevilla Club de Fútbol. Lo cual demuestra que los aficionados merengues tienen 'maneras'. Lo cual no es fácil de encontrar en los tiempos que corren. 

Nada más ponerse el balón en juego se vio claramente que el Madrid estaba dispuesto a resolver el partido en un amén. Y así fue: Kylian Mbappé marcó un golazo en el minuto nueve. Lo hizo de potente disparo y desde una distancia de veintitantos metros. Mas o menos... Tanto que produjo satisfacción a raudales en el Estadio; debido a que el madridismo desea fervientemente que la estrella francesa vaya adquiriendo la confianza precisa para que muestre su auténtica valía. Lo cual, sin duda alguna, se hará realidad muy pronto.

Cuando habían transcurridos diez minutos del espléndido primer gol, Fede Valverde obtuvo el segundo. Un tanto marca del jugador uruguayo. Su derechazo entró como un obús en el marco defendido por Álvaro Fernández. El tercero en pleno dominio del Madrid fue obra de Rodrygo. Acortó distancias Isaac Romero. En la segunda parte Brahim Díaz logró el cuarto y Luka Bakio marcó el segundo del equipo hispalense cuando el partido estaba a punto de terminar. 

En suma, el Real Madrid obtuvo la victoria. Sin embargo, su defensa sigue dando muestras visibles de ser vulnerable en el juego por elevación. Fallos que deberán ser corregidos a fin de que no sean aprovechados en los encuentros que se avecinan. Pues es incomprensible que tanto Rüdiger como Tchouameni sean desbordados por arriba con tanta facilidad. A pesar de la altura que ambos tienen. Amén de la ayuda de Fede Valverde y de la estatura de Thibaut Courtois.