Naufragio defensivo del Madrid en El Estadio de la Cerámica

 El sistema defensivo de un equipo tiene como principal protagonista al entrenador. Es él quien ha de organizarlo. El Madrid lleva tiempo fallando muchísimo en ese menester. A pesar de tener un técnico italiano. Los cuales se han distinguido siempre por ser maestros de esa misión táctica. Es inexplicable cómo los jugadores amarillos se deshacían de los marcajes de los laterales y acababan sacando de quicio a los centrales merengues. Daba pena ver las concesiones que ofrecían a los delanteros castellonenses los Alaba, Mendy, Rüdiger y Militâo. Ante esa debacle era imposible que Tchouameni no perdiera el oremus como escudo de la defensa. Aun así, la primera parte terminó con empate a cero.

Yeremi Pino abrió el marcador en el 46'. Empató Benzema de penalti en el minuto sesenta. Y Gerard Moreno deshizo las tablas desde los once metros cuando apenas habían transcurridos cuatro minutos. Los comentaristas de la televisión no cesaban de decirnos que ambos equipos estaban jugando un gran partido. Pues bien, si el Madrid sigue jugando así es casi imposible que sus rivales no se aprovechen de los fallos estrepitosos que ha cometido hoy en El Estadio de la Cerámica. Militäo Alaba, Mendy y Rüdiger  estuvieron a merced de los extremos rivales y sobre todo nunca acertaron en el marcaje a Gerard Moreno. Cuya habilidad para jugar como falso nueve nadie supo atajar. 

La derrota de hoy pone en evidencia a Ancelotti. El cual no ha conseguido todavía que su equipo sea capaz de afrontar una presión como la realizada por el equipo amarillo. Una presión exhaustiva... Claro que sí. Pero que hay maneras de combatirla. Y hay que emplearlas, Por más que los puristas digan lo contrario. El Madrid sabe ya lo que le espera en el encuentro de Copa que habrá de jugar frente al mismo equipo y con el mismo estilo de juego.