Olvidarse de Mbappé es saludable para el Madrid

 "El fútbol es un negocio" es el título de un artículo escrito por servidor el 31 de agosto de 2021. Debido a que se hablaba tanto o más del fichaje de Kylian Mbappé por el Real Madrid que de la pandemía que causaba estragos y por tanto generaba miedo a granel. Así que copio literalmente dos párrafos de lo que opiné entonces. 

"Yo no sé, a las seis de la tarde cuando escribo, si Kylian Mbappé será jugador del Madrid antes de las nueve de la noche o no. Pero no me cabe la menor duda de que el verano de 2021 será recordado siempre por el ansia irrefrenable de Florentino Pérez de fichar al jugador francés. Hasta el punto de que la última oferta ha sido de ciento ochenta millones de euros. Mas el dueño del París Saint Germain es rico como Creso y se puede permitir el lujo de hacerse tirabuzones con la fortuna que le ofrece el presidente de la 'Casa Blanca'.

Pero Nasser Al-khelaifi, que así se llama el presidente del club parisino, también está aprovechando la ocasión que le brinda un personaje como Florentino Pérez para enfrentarse a él con arrogancia y sin decaimiento de ánimo en una puja que pasará a la historia. De ahí que alguien haya acertado al decir que Nasser Al-khelaifi tiene más orgullo que don Rodrigo en la horca. Pues el dueño del PSG sabe que los triunfos son grandes si el rival es grande. Y el presidente del Madrid lo es por todo lo que significa el club". 

Mabppé, nueve meses después de publicar lo ya reseñado, ha dejado a Florentino Pérez en la estacada. Ha incumplido su palabra. Semejante comportamiento ha suscitado tanto interés como opiniones al respecto. Es reveladora de lo ocurrido la pronunciada por Di María: "Mbappé ha tomado la decisión correcta, todavía es joven y tiene tiempo de ir al Madrid". Y ha rematado lo dicho con la siguiente revolera: "La gente del Madrid es complicada, pero Kylian tiene suficiente talento para ganarse a la afición del Bernabéu cuando pasen dos o tres años". 

Palabras que conviene traducir: Kylian Mbappé aún no está preparado para soportar el miedo escénico que produce el Bernabéu y su afición. Mi respuesta es que tampoco lo estará dentro de tres temporadas. Incluso apostaría a que el presidente del Madrid no volverá a darle la oportunidad de que juegue en el mejor equipo del mundo.