Pepe Carballeda es tan del Madrid que las derrotas de su equipo lo aplatanan. Una indolencia que le dura varios días. Y además se le avinagra el carácter. Lo mejor es no prestarle atención. Postura que adoptamos quienes lo conocemos. Mi amigo vive en Rota y solemos hablar por teléfono para recordar tiempos pasados y sobre todo para chamullar de fútbol. Hoy he recibido su llamada y lo primero que me ha dicho es que no está de acuerdo con mi opinión sobre Marco Verratti. Que el jugador del París Saint-Germain no goza de todas las cualidades futbolísticas que yo lo otorgo...
Dado que conozco muy bien a PC, sé que habla poseído por el miedo que le produce el hecho de que yo considere que anular a Marco Verratti no será fácil. Y a fe que es verdad. Por ser un futbolista que no se deja localizar ni aun estando tan a la vista en el terreno de juego. A un mediocentro como el italiano, titular indiscutible en su selección, hay que marcarlo con un futbolista veloz y capacitado para sacarle rédito a los balones que sea capaz de robarle cerca del área.
Pepe acepta mi parecer a regañadientes y además me pregunta qué otra cosa cabe destacar del equipo parisino. Y le contesto a media vuelta de manivela: su estrategia. Verbigracia: presiona muy arriba para impedir que el rival saque el balón jugado e incluso que lo pierda en zonas consideradas peligrosas. Y además ataca con los laterales muy avanzados porque Paredes y Danilo les guardan las espaldas. Así apabullaron al Madrid en la primera parte jugada en El Parque de los Príncipes. Donde Messi apenas intervino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comenta mis escritos ,pero desde el respeto.
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.