Un Madrid imparable

Cuando Benzema se sentó en el césped del Real Arena y pidió el cambio, debido a un problema muscular, lo primero que pensé, además de la importancia de la baja, que el sustituto debería ser Marco Asensio para que jugara como delantero centro falso. A fin de cundir la desorientación en los centrales de la Real Sociedad. Poco habituados a salir de su zona. Ancelotti, sin embargo, decidió darle la oportunidad a Jovic. El cual no jugaba desde hacía la tira de tiempo. Y acertó el técnico italiano. Lo cual no quiere decir que el futbolista serbio vaya a ser a partir de ahora el delantero ideal para su equipo. Ojala lo fuera.

Ambos equipos jugaron una primera parte trepidante, hubo emoción a raudales y buen juego. La Real Sociedad comenzó presionando muy arriba. Y el Madrid supo contrarrestar semejante presión con tranquilidad y precisión en las salidas de balón desde atrás.  Pero hubo un momento en el cual Ancelottí ordenó a Courtois que sacara la pelota en largo. Para eludir el atosigamiento de sus rivales y asimismo para aprovechar las segundas jugadas. Y el encuentro se fue nivelando. Cierto es que los jugadores donostiarras se estrellaban una y otra vez con ese muro compuesto por Militâo y Alaba. Que dieron todo un curso de cómo hay que defender. Con empate a cero se llegó al descanso.

La segunda parte fue del Madrid. De ahí que los goles de Vinícius y Jovic fueran el premio a la superioridad del equipo blanco. Jovic, además de marcar el segundo tanto, participó en el primero de Vinícius. El cual está rayando a una altura indescriptible. Quien no acaba de dar el paso adelante es Rodrygo. Da la impresión de estar maniatado por una timidez que le impide demostrar las muchas cualidades que atesora. Así que está desperdiciando las oportunidades que le viene dando Ancelotti. En suma, partido grande del Madrid en el Real Arena. Y que le permite sacar muchos puntos a sus rivales más encopetados.

Ah, espero que los amantes del tiqui-taca se hayan dado cuenta de que también se puede eludir una presión con balones largos y además hacer daño en ataque. Y es que en el fútbol todo estilo de juego vale si se hace bien.