La eficiencia de Courtois gana partidos

El portero belga ha sido uno de los fichajes más acertados del Madrid desde hace no pocos años. Destaca sobremanera cuando su equipo lo pasa mal y también cuando lo hacen intervenir de higos a brevas. Hoy ha tenido mucho trabajo y lo ha resuelto extraordinariamente. La eficiencia del guardameta blanco es de un valor incalculable para su equipo. Derrocha aptitud, capacidad y compite desde la portería con una serenidad que desequilibra a sus rivales. Y además tiene suerte... De no tenerla, Tanto Raúl García como Iñaki Williams no hubieran fallado goles cantados. 

Los primeros quince minutos del Madrid fueron excelentes: Modric y Kroos se adueñaron del centro del campo e imprimieron un ritmo alto de juego. Ambos movieron el balón con velocidad y precisión. De modo que los jugadores bilbaínos anduvieron desorientados durante todo ese tiempo. Pero el dominio del equipo blanco no se tradujo en goles. Y, de pronto, Muniain cogió la batuta y los leones principiaron a rugir. Y tuvieron tres ocasiones de gol. Dos de Williams y un cabezazo de Raúl García que fue a las manos de Courtois.

En esos momentos de dominio absoluto del Athletic, dirigido por Muniain, en el Madrid naufragaba Casemiro. Cuya baja forma es evidente. Es un mediocentro que lleva tiempo sin cumplir con sus funciones. No bascula a los costados, no está presente en las ayudas, y tampoco participa como escudo de la defensa. Cubre poco espacio y además nunca sale de esa zona de confort que él se ha marcado. El gol de Benzema (39') llegó cuando más estaba sufriendo su equipo. Disparó Asensio, el balón lo rechazó Unai Simón, tropezó en Modric y fue a parar a los pies de Benzema.

El Athletic fue muy superior en la segunda parte. Dado que Kroos y Modric acusaron cansancio. Lo cual es lógico, debido a que ambos vienen jugando todos los partidos. Y, claro es, surgieron las oportunidades de los hombres dirigidos por Marcelino García Toral. Los cuales gozaron de varias oportunidades para empatar. Pero erraron unas y otras las paró Courtois. Los cambios del Madrid eran necesarios. Pero muy comprometidos. Sobre todo porque Ancelotti decidió cambiar el centro del campo cuando los vascos apretaban de lo lindo. Menos mal que la eficiencia de Courtois gana partidos.