La prensa siempre es perversa para los políticos

Para el político la prensa siempre es perversa, incluso para el político que triunfa. Frase adjudicada a Leopoldo Calvo Sotelo: presidente del Gobierno de España entre febrero de 1981 y diciembre de 1982. Pero no siempre es así. Verbigracia: mientras VOX Ceuta cree a pie juntillas, y así lo manifiesta a cada paso, que hay medios de comunicación que actúan con parcialidad, Juan Vivas sale en defensa del periodismo en general. 

Semejante apoyo a los medios de comunicación es aireado como propaganda interesada por parte de nuestro alcalde. No todo se compra, hay valores y principios en los profesionales del periodismo, ha dicho la primera autoridad de Ceuta. Y lleva razón. Aunque tampoco es menos cierto que él sabe que también los hay dispuestos en cualquier momento a poner la mano. Axioma que no desmienten ni siquiera los acérrimos corporativistas del oficio de escribir.

Yo recuerdo una frase que nuestro alcalde decía cuando se encontraba a gusto en una reunión: "Si puedes hazte amigo de un periodista". Y a fe que él lo llevaba a cabo mucho antes de sentarse en la poltrona municipal. Relaciones que me parecían satisfactorias en alguien que ya deseaba fervientemente participar en la política activa y sobre todo hacerlo con éxito. Ahora bien, en cuanto fue adquiriendo notoriedad y creyó ser don Juan I de Ceuta, estimó conveniente aplicar este artículo: "Si el periodista no es de mi agrado hay que aplicarle el reglamento establecido para esa contrariedad".

El reglamento era, no sé si lo seguirá siendo actualmente, quejarse al editor del medio en el cual hubiera un opinante molesto para el Gobierno local. Quejas que  no cesaban y por tanto el escribidor las padecía sin solución de continuidad. Control que aprovechaba servidor, y perdonen que hable de mí, para ser más sutil en los comentarios. Un día, harto ya de estar sometido a semejante vigilancia, decidí no escribir más. Y lo hice, de verdad de la buena, antes de que el editor se viera forzado a echarme.