Marco Asensio fue un soplo de aire fresco

El Granada sabe a lo que juega y además lo hace bien. El equipo dirigido por Diego Martínez es un calco del Getafe de Bordalás temporadas atrás. Sí, ya sé que las comparaciones son odiosas. Pero su sistema de juego es igual. Cambiando lo que haya que cambiar. Que es bien poco. El dibujo es de 1-4-1-4-1. Pero suelen presionar muy arriba y si pierden el balón no dudan en tratar de recuperarlo en el sitio de la pérdida. Aunque sus jugadores -si ven que es imposible- optan por replegarse intensamente. Dejando a Soldado aislado para distraer a los centrales rivales.

Tampoco dudan los granadinos en invadir el campo contrario: Rui Silva, su portero, saca siempre por elevación y muy largo, alejando a los adversarios de su portería. A fin  de aprovechar las segundas jugadas. Pudo marcar el Granada nada más comenzar el partido. La primera ocasión, tras un pase fallido de Varane, que no aprovechó Puertas. La segunda se debió a un despiste de Courtois. Ni que decir tiene que los nervios afloraron en un Madrid cuyo juego no tenía ni pies ni cabeza. Cuando se había rebasado la media hora, Rodrygo, que hasta entonces no había dado señales de vida, se lesionó y fue sustituido por Marco Asensio.

Fue pisar el césped el mallorquín y cundir el pánico en el área del Granada. El primer balón que tocó lo repelió el poste cuando ya estaba batido Rui Silva. El segundo puso a prueba al guardameta portugués y el tercero lo envió  Casemiro a la red. Fue un centro medido a la cabeza del brasileño. Es decir, que en siete u ocho minutos el panorama cambió radicalmente. Aunque Courtois tuvo que hacerse notar en una acción llevada a cabo por Puertas. En suma, la entrada de Asensio fue un soplo de aire fresco para su equipo. Ojalá que sea el principio de una recuperación que los madridistas están deseando que se haga realidad. 

El segundo gol lo obtuvo Benzema. Era la sentencia de un partido que estaba ya a punto de concluir. Conclusión: lo mejor del encuentro fue la notable actuación de Marco Asensio. Ojalá que tenga la continuidad necesaria para hacerse con la titularidad. El Granada, insisto, es una copia exacta del Getafe de Bordalás, en temporadas pasadas.