Gran partido de Vinicius

Si el Madrid gana La Liga, lo cual no le será fácil si sigue jugando como lo ha hecho en el Reale Arena, será gracias a Vinicius. El joven brasileño desquició a su marcador y fue capaz de romper el equilibrio de todas las líneas del equipo dirigido por Imanol Alguacil. Y sobre todo logró tapar con su extraordinaria actuación todos los errores cometidos por su entrenador: Zinedine Zidane. 

El primero fue colocar a James en una posición en la cual está condenado a dar una mala imagen. Sabido es que donde más rinde el colombiano es de mediapunta. Pero nunca como volante exterior por la derecha con la misión de cerrar la banda a las incursiones del lateral contrario. Con esa decisión, Zidane, además de jugar con diez, volvió a poner a James en la picota. Y dejó el centro del campo debilitado.

La Real Sociedad, que no es actualmente ni la sombra de lo que fue antes de la supensión de La Liga, adelantó su defensa y presionó muy arriba para impedir que el Madrid pudiera sacar el balón jugado desde atrás. Y sobre todo intentó explotar las debilidades defensivas de Marcelo. Pero los jugadores de la Real no supieron nunca cortar de raíz las incursiones de Vinicius. La primera parte terminó sin goles. Y tuve la certeza de que Imanol Alguacil trataría de tapar el agujero que tenía por la banda izquierda. Donde Gorosabel -lateral diestro- las había pasado canutas. ¡Que si quiere arroz, Catalina!

Fue comenzar la segunda mitad y Vinicius, más veloz que el viento, se fue de su marcador y tuvieron que derribarlo en el área cuando estaba a punto de batir a Remiro. El penalti lo tiró el de siempre: Sergio Ramos. Y Benzema obtuvo el segundo gol en el minuto setenta. Ni que decir tiene que la Real Sociedad daba muestras evidentes de haber aceptado ya la derrota. Pero los cambios de Zidane, salvo el de Sergio Ramos por lesión, fueron innecesarios. Hasta el punto de que el gol de Merino en el minuto ochenta puso en riesgo la victoria blanca. 

Un triunfo que le permite al Madrid estar en las mejores condiciones para ganar La Liga. Pero su juego en San Sebastián ha dejado mucho que desear. Y, desde luego, los errores de Zidane fueron varios y palpables.