La defensa del Madrid vuelve a ser un coladero

El Celta marcó dos goles y pudo haber hecho un tercero si Courtois no lo hubiera evitado con una prodigiosa intervención. La descoordinación de los defensas merengues comenzó ya en el primer gol de Smolov y terminó siendo manifiesta hasta que Santi Mina logró el tanto del empate. Es inconcebible que Ramos abandone su posición continuamente para hacerse notar en las demás líneas por sistema. Olvidándose de que es central y no delantero centro.

El Celta evidenció desde el primer momento que es un equipo con calidad que está pasando por un mal trance. Rafinha, con la ayuda de Aspas, jugando como delantero flotante, hizo cuanto quiso por la banda derecha, izquierda del Madrid. Pero nadie le prestó la atención debida a esa sociedad cuyo peligro se veía a la legua. Tal es así que en un despiste monumental de los cuatro zagueros llegó el gol de Smolov. Corría el minuto siete y el encuentro se le complicaba al conjunto blanco. En el cual Casemiro -tan alabado por sistema- incumplía su misión como escudo de la defensa.

El Madrid, gracias a la labor de Kroos y sobre todo a las intervenciones de Hazard, comenzó a dominar el partido. A pesar de que Rafinha y Aspas trataban de hacer daño por ese costado izquierdo al que Varane ha de acudir desesperadamente, cada dos por tres, a tapar el agujero que deja su compañero Ramos. Quien tiene licencia para jugar a su aire... Y al francés, lógicamente, se le acumula el trabajo. 

 La segunda parte principió con dominio del Madrid y con Hazard amedrentando en cada jugada a sus rivales. Empató Kroos -minuto cincuenta y uno- con un tiro desde la media distancia. Tras recibir un pase de Benzema que había combinado con Marcelo. Luego se adelantó el Madrid de penalti. Por derribo de Rubén a Hazard. Falta innecesaria. Pero penalti como una catedral. Y que le permitió a Ramos obtener ese gol que siempre anda buscando. El entrenador del Celta fue valiente y apostó por fortalecer a su equipo con dos delanteros: Deni Súarez y Santi Mina. Mientras el Madrid seguía jugando alocadamente. 

El cambio de Hazard por Vinícius era lógico. Pues el belga llevaba mucho tiempo sin jugar. Tampoco fue descabellado recurrir a Mendy como lateral y situar a Marcelo por delante del francés. Aunque lo ideal hubiera sido aconsejarle a Ramos que se mantuviera en su demarcación, debido a que el partido estaba dando las boqueadas. Que si quiere arroz, Catalina... 'El Gran Capitán' seguía sumándose al ataque porque así lo quiere él. Y, claro, Deni Súarez, atrajo la atención de un Ramos que venía de merodear por el área contraria y su pase le valió a Santi Mina para batir a Courtois.

Cabe destacar la extraordinaria actuación de Hazard. Como conviene resaltar que  la defensa del Madrid vuelve a ser un coladero. Mal asunto... Puesto que La Liga se suele ganar encajando pocos goles. Zidane debe cortar de raíz semejante falta de coordinación defensiva.