Jorge Valdano fue premiado en el Camp Nou

Manuel Vázquez Montalbán podía escribir de lo que quisiera y hacerlo bien. Cumplía sus deberes sin pecar jamás de pedante. Generacionalmente se le podría situar como uno de los maestros del columnismo tardofranquista. Luego, con la democracia, lo hizo siempre mediante un marxismo irónico. MVM nunca dejó de creer en la lucha de clases. Y, en cuanto se ponía a gusto, decía que los barones de Convergencia eran todos hijos de señoritos.

Quien escribe ha leído casi toda la obra del gran escritor catalán: títulos como la Soledad del manager. Los mares del Sur. El delantero centro fue asesinado al amanecer y Tatuaje...: Novela en la que se produce el nacimiento de Carvalho como detective y madura como personaje. Y, desde luego, leía con avidez sus ensayos y artículos en los periódicos. En los que a veces no dudaba en arremeter contra quienes daban muestras de pijerías. Es decir, que no tenía buen concepto de los pijos.

A Jorge Valdano se le ha otorgado -recientemente- el  XIV premio internacional de periodismo de Manuel Vázquez Montalbán en el Camp Nou. Donde su presencia fue acogida como si hubiera sido jugador y entrenador del Fútbol Club Barcelona desde su llegada a España. Lo cual demuestra que la cordura catalana es algo más que un tópico. Eso sí, cuando les conviene a los catalanes. Pues en esa tierra todo tiene un precio.

Valdano se dirigió a los asistentes al acto con palabras no leídas.  Y no dudó en decirles que, durante muchos años, había sido lector de innumerables libros... Para, a renglón seguido, destacar su condición de hombre hecho a sí mismo -en cuanto al oficio de hablar y escribir en los medios- con esta frase: "Si buscan a un autodidacta, mírenme a mí". Presumir de autodidacta no está bien visto. Pues todos aprendemos de alguien. Salvo que cualquier estúpido crea que si no has ido a la universidad no eres nadie.

Se cuenta que Unamuno elogiaba en Salamanca ante el claustro, al escritor paraguayo Rodó, y sus colegas universitarios le reprocharon. Pero, profesor, ¿cómo elogia usted a alguien que no tiene estudios? Y el filósofo respondió: "No tiene estudios, pero es un maestro. Nadie tiene autoridad moral, ni civil, ni periodística ni política ni nada, para desautorizar el trabajo de una persona que no tenga estos o aquellos estudios".

Ejemplos hay muchos. Pero creo que bastará con citar los siguientes: Ernest Hemingwey, Jorge Luis Borges, Francisco Alejandro Pérez Martínez -más conocido como Francisco Umbral- y José Saramago. Quien solía decir que vivía en una casa hecha de libros. En fin, que yo disiento a veces de las opiniones de Jorge Valdano como comentarista de partidos de fútbol. Pero me consta que ha trabajado duramente para hacerse con una cultura que le permite mantenerse en la cresta de la ola del periodismo deportivo.