El Viktoria Plzen parecía ser el equipo hecho a la medida para que el Madrid ofreciera su mejor versión a fin de presentarse en el Camp Nou convencido de sus posibilidades de ganar al Barcelona sin Lionel Messi. Pues todos sabemos que la ausencia del argentino disminuye a sus compañeros y estimula sobremanera a los adversarios. Pero, visto lo que ha sucedido ante el equipo más accesible de su grupo, mucho me temo que las dudas sobre el mal momento que atraviesa el Madrid habrán aumentado y puede que haya motivado a los jugadores azulgrana.
Los checos decidieron defender con nueve y dejaron como único delantero a un tal Krmencik. Y éste se bastó él solo para que en el Bernabeu cundiera el pánico. Menos mal que de las cinco ocasiones claras de gol que tuvieron los visitantes, nada más que obtuvieron un gol cuando el partido estaba dando las boqueadas y el Madrid, además, se quedaba con diez por lesión de Marcelo. Dado que Lopetegui había realizado los tres cambios.
Del Viktoria Plzen conviene decir cuanto antes que atacaba mejor que defendía. En la segunda tarea yo no había visto un equipo de Champions League tan malo desde hacía años. Con un portero atacado de los nervios y dando facilidades a tutiplen. Y, ante semejante bicoca, los jugadores del Madrid se dedicaban a jugar un rondo soporífero y causante de bostezos interminables. El gol de Benzema llegó a los once minutos. Pero el equipo siguió jugando un fútbol ramplón que a nada conducía.
Y lo peor del caso es que la defensa del Madrid era un coladero. Pues en cuanto los centrocampistas perdían el balón el único delantero de los checos, el tal Krmencik, les sacaba los colores a todos. Isco fue sustituido por Valverde en el minuto 53. Y en el 55' Marcelo marcó el que parecía el tanto de la tranquilidad, pero ¡que si quieres arroz, Catalina! Dado que los checos contragolpeaban siempre con peligro. Y así hasta que obtuvieron su gol y el Madrid en inferioridad numérica se encogió repleto de nervios y pidiendo la hora.
La salida al campo de Marco Asensio por Bale y la de Mariano por Benzema no surtió ningún efecto favorable por la escasez de tiempo y porque el Madrid se quedó con diez jugadores. Del partido lo importante radicó en la consecución de los tres puntos. Aunque la impresión dada por el equipo fue pésima. No funcionó ninguna línea. Si bien la defensa falló en todos los sentidos. Así, el modesto equipo checo pudo marcar cinco goles. El Madrid, pues, las pasó moradas frente a un equipo menor.
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