Miscelánea

Muchas son las vicisitudes de la vida que uno lleva almacenadas en la alacena de la memoria. Tantas como para revisar cada día una de ellas con buen talante. Aunque la elegida sea una entre las muchas que me pusieron al borde del disparate. Me estoy refiriendo a la que me tocó vivir cuando acudí presto a la Federación de Fútbol de Ceuta a reclamar mis derechos y me topé con alguien que no dudó en ponerse de parte de un tramposo que invirtió mis dineros en comprar una agencia de viaje cercana a la plaza de África. Este suceso se me vino a la mente nada más leer que se había inaugurado la sede de la FFCE. Y me acordé de Pedro Moreno. Un tipo íntegro y con quien mantuve las mejores relaciones. Lo que no me podía esperar es que Antonio García Gaona lloriqueara durante el acto. Ojalá que sus gimoteos por quien él sabe no se conviertan en llanto de verdad por todo lo que sabemos. Es mi deseo.

La parcialidad de parte de la prensa deportiva madrileña es manifiesta. Hay jugadores del Madrid que tienen bula. O lo que es lo mismo: tienen autorización, expresa o tácita, para hacer algo prohibido a los demás. Privilegio indigno y que va calando entre los perjudicados a paso de legionario. Y, naturalmente, va dejando en ellos la herida sangrante de saberse en desventaja con quienes son tratados a cuerpo de rey cuando están acertados y nunca censurados en la medida exigible a sus malas actuaciones. Marcelo lleva ya un mundo haciendo por su banda lo que le sale de sus dídimos. Su anarquismo por sistema le es perdonado porque sí. Sin que a nadie se le ocurra decirle al brasileño que su manera de proceder es dañina para el equipo. Ni siquiera Sergio Ramos se atreve a indicarle que sus negligencias son causantes de que él falle más que una escopeta de feria. La prensa, en cambio, no duda en arremeter siempre contra Varane. 

He aquí lo que dice un opinador de fuste en lo tocante a Isco y Benzema: "Se echó en falta (¿no sería mejor de menos?) esta vez la magia de los artistas de la compañía. Ni Benzema ni Isco frotaron la lámpara, ni tampoco Asensio el poco rato que estuvo en el campo. Tampoco Marcelo hizo el daño arriba de sus grandes días, también en esa faceta se nota que tiene aún muy cerca la lesión". Trato exquisito, pues, del señor Relaño a sus futbolistas protegidos. Pero a costa de meter en el mismo saco a Marco Asensio. El cual estuvo diez minutos mal contados en el césped. Y qué habría dicho el director del Diario As de haber sido Gareth Bale uno de los juzgados. ¿Se lo imaginan? Pues yo sí.

Cuando Dani Ceballos fue fichado por el Madrid, quien escribe no tuvo el menor empacho en decir que el bético llegaba a una plantilla donde había muchos y muy buenos centrocampistas. Y hasta opiné que el jugador nacido en Utrera tenía por delante a Isco. Y que para disputarle la titularidad al malagueño, que llevaba varias temporadas en el club y contaba con el beneplácito de los intelectuales de la cosa, no debía, bajo ningún concepto, parecerse en nada a él. Pues bien, el Madrid necesita un mediapunta capaz de enlazar con los delanteros sin salirse de su misión cuando pintan bastos. Que es lo que suele hacer Isco Alarcón. Yo creo que DC está más que preparado para jugar más de lo que lo viene haciendo. Y asimismo vislumbro que, en caso de hacerlo y salir  airoso del lance, provocaría una lucha intestina como la que ya existe con Marco Asensio. De quien tengo la impresión de que está siendo ninguneado. Espero y deseo, como madridista fetén, que el futbolista balear no baje la cerviz y se deje arrastar por la poderosa fuerza de la Iscomanía reinante.