Cada vez que nos vemos, que son pocas veces, Manolo Merlo no duda en pegar la hebra conmigo con la amabilidad característica en él y ese saber escuchar que tanto le distingue. Al director del Centro Dramático de Ceuta, desde hace un montón de años, le gusta el fútbol y suele preguntarme al respecto. Y a mí me encanta ponerlo al tanto de mis pareceres acerca de los últimos acontecimientos relacionados con el deporte rey.
Cuando ello sucede, como así ha sido hoy, debo confesar que me gustaría decirle a Manolo Merlo que no le pregunto sobre cuestiones vinculadas con su teatro porque no voy. Y, por supuesto, porque no encuentro la excusa apropiada para que me redima de tal hecho. Ni siquiera me valdría culpar a mis pobres ojos arrasados. Dicho queda.
Manolo Merlo, por ser lector de cuanto escribo, estaba ya enterado de lo comentado por mí acerca del partido Madrid-Barcelona correspondiente a la Supercopa de España. Aun así, quiso que yo ahondara más en mis apreciaciones. Y fui al grano: "Verás, Manolo, el problema del equipo azulgrana es que algunos de sus hombres gloriosos aún no están acabados del todo y los nuevos no han conseguido mejorarlos.
Verbigracia: yo invito a que los hinchas del Barça vean otra vez los dos partidos de la Supercopa con la tranquilidad que da el conocer el desenlace de ambos y sigan las huellas de Sergi Busquets. Incluso que tomen nota de sus intervenciones y, por encima de todo, que presten suma atención a cómo está Busquets situado cuando sus adversarios contraatacan.
Si lo hacen, y no se dejan engañar por actuaciones de otrora, no tengo la menor duda de que sufrirán el mayor de los desengaños. Ya que Busquets ni defiende ni ataca ni ordena. Y, es claro, Piqué, Mascherano, Umtiti, y cualquier otro zaguero central están ya hasta los... adminículos de soportar semejante farsa.
El teatro, querido director del Centro Dramático de Ceuta, y nadie mejor que tú para saberlo, es un acto de vida y su arquitectura -dicen quienes saben del tema- es sutil y variada como la de una sinfonía. Cuyo aspecto clave es la acción. Pero no cualquier acción. En el fútbol ídem de ídem.
El conjunto del Barcelona se ha ido al garete. Ahora mismo desafina. Y lo peor de todo es que siguen añorando a Xavi y pronto tendrán nostalgia de Andrés Iniesta. He aquí, pues, un drama deportivo que bien podría ser escenificado por tu exitosa compañía. Y como primer actor, yo te recomendaría a Gerard Piqué.
Un abrazo, y deseos de que sigas teniendo éxitos. Tocayo.
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