El Madrid ha salido de Sevilla con secuelas

Me van a permitir que copie literalmente lo que escribí el 13 de enero del año que corre. Es decir, hace cinco días. "El Celta de Vigo es un adversario difícil para el Madrid, muy difícil. Pues cuenta con grandes jugadores y además suelen jugar sin ningún tipo de complejo en los escenarios grandes. A mí, y no es la primera vez que lo aireo, me encanta ver al equipo dirigido por Eduardo Berizzo".

"Es el Celta el único equipo de la Liga Santander que practica el marcaje mixto. Es decir, sus jugadores siguen al hombre en jugada para volver inmediatamente a la demarcación asignada, una vez concluida la acción defensiva. Sistema táctico que exige sacrificio individual, además de coordinación entre líneas, y del cual ningún jugador puede escaquearse si no desea verse retratado para mal".

"De entre todos los buenos futbolistas que forman la plantilla del Celta, no hace falta ser muy listo para atreverse a decir que Iago Aspas brilla con luz propia. ¡Cuidado con el Celta!". Pues bien, ni que decir tiene que la opinión del viernes pasado, podría ser el resumen de lo que ha ocurrido hoy en el Bernabéu".

El Madrid quiso pero no pudo ante un Celta que jugó en el Bernabéu con el desparpajo de siempre y sobre todo presto en todo momento a buscar el marco de Kiko Casilla. Empezaron con una línea de 4-3-2-1, y a medida que corría el tiempo Berizzo ordenó que se fueran sumando más jugadores en los contraataques. En el Madrid, mientras tanto, el único que sobresalía era Modric. En esta ocasión, y aunque por las bandas penetraban Lucas Vázquez y Asensio, sus centros no encontraban a un Cristiano que no acaba de rendir en esa posición de delantero centro.

La segunda parte fue un desastre madridista. El Celta llegó al minuto sesenta con mejor condición física y superior disposición táctica. Y a partir de entonces fue haciendo méritos suficientes para marcar dos goles. El primero lo consiguió Aspas... Y, tras empatar Marcelo, una pérdida de balón en el medio campo, por parte de Lucas Vázquez, permitió a Aspas ponerle el balón a huevo a Jonny. Y éste obtuvo el segundo tanto de los celtiñas.

Los cambios fueron llegando: Morata por Asensio; Kovacic por Vázquez, y Benzema -falló un gol cantado- por Danilo. Pero no aportaron las soluciones requeridas para someter a un Celta que demostró su valía, una vez más, en un escenario grande. El Madrid ha salido de Sevilla con secuelas. También lo anunciamos en su momento. La eliminatoria está muy complicada para el Madrid. Verdad de Perogrullo.