Al Hotel Ceuta PdA no le fían un barril de cerveza

Muchas han sido las veces que yo he escrito sobre el Hotel La Muralla, más tarde incorporado a la red de Paradores Nacionales, puesto que en él disfruté de una tertulia en la cual era muy difícil hacerse un sitio como contertulio con derecho a disentir sobre costumbres consideradas leyes. Yo tuve la suerte de ser admitido.

En el Rincón del Muralla, que así se llamaba el sitio donde acudíamos los numerarios todos los días y fiestas de guardar, con el fin de darle a la sinhueso con verdadera devoción, el misoneísmo era la nota dominante. Dicho ello, créanme, sin sentido peyorativo. Máxime cuando casi todos los miembros de aquella reunión frisaban en los sesenta hacia arriba.

Del Hotel La Muralla, luego Parador, guardo yo muy gratos recuerdos. Y nunca me he cansado de propalarlo. Verdad es que con el paso de los años el Parador fue a menos en cuanto a ser su cafetería motivo de atracción para quienes buscábamos solaz mediante los comentarios y chismes del momento.  Sobre todo por fallecimientos y cambios de residencia de sus principales tertulios.

Del Hotel La Muralla, luego Parador,  yo pasé a dejarme ver por la barra del Hotel Tryp. Era la época del ladrillo y el pelotazo y sobre todo de los fantamas que llegaban a Ceuta convencidos de que aquí se amarraban los perros con longaniza. Y hasta se permitían el lujo de querer asombrar a la gente teniendo más cuento que Calleja.

Aun así, o mejor dicho por ello, el Tryp funcionaba muy bien. A lo cual contribuían unos estupendos empleados que ayudaban a que nos sintiéramos como en casa. Tan bien como se sentían quienes llegaban para alojarse en el establecimiento, Pronto, sin embargo, cundió el rumor: "Aquí las facturas se acumulan en los cajones y no hay cojones de cobrarlas". Lo cual no dejaba de ser la muerte anunciada de un gran hotel.

Traigo esto a colación, a pesar de haberme resistido a hacerlo desde hace algún tiempo, porque hoy me he enterado de que el Hotel Ceuta Puerta de África -sí, ha vuelto hacer uso del nombre primigenio- ha disfrutado de una gran ocupación en el mes de agosto. Pero también se me dice que, a partir de mañana y si alguien no lo impide, si usted pide una cerveza de barril le dirán que nones... Que no se la pueden servir. ¿Por qué?...  Porque se ha terminado el último barril y la empresa distribuidora se niega a atender la petición por falto de pago.

Aunque espero y deseo que el Hotel Ceuta Puerta de África no pase por la vergüenza de quedarse sin cerveza de barril. Porque no le fían.