Presume de que lleva votando a la derecha desde que en España se produjo la restauración democrática. Comenzó con Alianza Popular y continuó haciéndolo con el Partido Popular. Ha ocupado cargos políticos y en esta mañana de septiembre, miércoles para más señas, me dice que Juan Vivas se ha ganado con creces el ser denunciado por Jesús Fortes, tras haber sido éste despedido como Comisario de la Fundación Crisol de Culturas. Aunque el hecho le cause al partido un daño enorme. Otro más. Y van...
-¿Qué te parece la decisión de Fortes?
Antes de responder, me recreo en la suerte saboreando el café.
-A mí me parece una puñalada trapera. Y una demostración palpable de que a los políticos no les interesa la política, lo que les interesa es el poder. Para ellos lo más importante es mandar, los cargos, puestos, prebendas..., y luego tratar de impedir que la gente se meta en lo que sí le importa.
En la cara de mi acompañante se refleja con nitidez que mi respuesta le ha sentado como un tiro. Y, tras unos segundos de duda, responde de tal guisa:
-Lo que menos esperaba yo es que te pusieras de parte del alcalde en un asunto en que la víctima ha sido Jesús Fortes, como bien podría haber sido otra persona. Pero en el caso de JF te recuerdo que fue éste quien llevó a Vivas de la mano al partido y además lo nombró director general de tributos. Y, por si fuera poco, siempre lo distinguió como funcionario y le dio un trato exquisito.
-Lo sé, claro que lo sé. Porque lo que tú dices me lo contó a mí Juan Vivas, y me dijo más: me aseguró también que él nunca traicionó a Jesús Fortes cuando los disidentes del GIL acordaron ofrecerles la alcaldía en bandeja a Luis Vicente Moro para que éste decidiera, con otros cargos populares, hacer alcalde a Vivas.
-Pues yo sigo manteniendo, pese a los años transcurridos, que JF fue traicionado. Y no me preguntes por los nombres de quienes participaron en semejante tropelía.
-Te equivocas, amigo, te equivocas; Fortes, entonces, era un político acabado. Había sufrido un voto de censura y sus enemigos eran incontables. Y además, por si no tenía bastantes problemas, alguien se encargó de hacerle el artículo demoledor en Madrid. De hecho, a mí me tocó ser, durante muchos días, el paño de lágrimas de un JF abatido. Por cierto, estaba tan atolondrado que no se acordaba de cuando, siendo alcalde, ni se dignaba dirigirme la palabra por no formar yo parte de los escribientes dedicados a adularlo por sistema y a viajar por cuenta del erario público.
-Resumiendo -dice mi acompañante-: que tú desapruebas la denuncia de Jesús Fortes a Juan Vivas.
-Sí. La considero desafortunada. Porque Jesús Fortes, que yo sepa, no es persona que viva con estrecheces económicas. Ni mucho menos. Y, dada la situación de pobreza extrema que están viviendo muchas familias, me parece una osadía querellarse por algo así. Ah, no olvides que yo viví intensamente aquellos tiempos en los que era alcalde Fortes y conocí cual era la situación de Ceuta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comenta mis escritos ,pero desde el respeto.
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.