Blog de Manolo de la Torre


Entrenador de fútbol, ha ejercido la profesión 19 temporadas. Escritor en periódicos,
ha publicado una columna diaria, durante dos décadas, en tres periódicos ceutíes.

martes, 5 de mayo de 2015

Desastre táctico del Madrid

Joaquín Caparrós en cuanto es destituido de su cargo se pone a dar lecciones de fútbol sin solución de continuidad. Algo que antes no sucedía. Ya que los entrenadores despedidos guardaban una especie de luto deportivo, durante un tiempo prudencial. Porque tenían lo que en el mundo del toro se conoce por vergüenza torera. Caparrós opinaba ayer o anteayer, que para el caso es lo mismo, de Sergio Ramos. Decía que éste es un portento físico, verdad incuestionable; y que tácticamente es perfecto. Lo cual es una mentira tan grande como la catedral de Burgos. A lo mejor es que Caparrós ve menos que yo. Que ya es ver poco.

Sergio Ramos pegó un petardo en el Juventus Stadium jugando en el centro del centro del campo. Algo que quien escribe ha venido anunciando en anteriores escritos. Ser escudo de la defensa significa saber jugar sin balón y estar presto en todo momento a cubrir las espaldas de todos los compañeros de la zaga. Incluso a elegir los momentos precisos para que éstos ataquen por sorpresa mientras él se queda como relevo de quien abandona su demarcación. Podría dar una clase teórica al respecto. Pero no creo que sea este el espacio adecuado.

En el  Madrid, sin embargo, el que sigue fallando, según no cesa de decirnos Juan Carlos Rivero, a voz en cuello, es Varane. Rivero, narrador él, se emociona incluso cuando remata Llorente a las manos de Iker Casillas y nos habla de milagro y se pone a vendernos pescado podrido. Pobre hombre... Su forma de actuar deja mucho que desear. Sobre todo porque cree que todos los espectadores somos tontos. De Alcorta, glosador, sólo me cabe decir que sus comentarios no están a la altura de su buen hacer cuando jugaba.

El primer balón que jugó Casillas con los pies pudo acabar en gol. Fallo que generó una gran desconfianza entre sus compañeros, desde el primer minuto. En el gol de Morata, por más que Alcorta quisiera engañarnos con un comentario absurdo, lo que debió hacer el portero es desviar el balón hacia la línea de fondo.  La banda izquierda del Madrid, compuesta por Isco y Marcelo, es una invitación a que los rivales la transiten a su antojo. Carlo Ancelotti ni se entera.

La Juve sólo necesitó del esfuerzo de Vidal, del trabajo entre líneas de Tévez , y del lío que, con sus desmarques, le armó Morata a los defensas visitantes, para obtener un triunfo con el cual no contaban los de Maximilliano Allegri. Y gracias a que Llorente no anduvo fino en las dos ocasiones que tuvo nada más sustituir a Morata. Si los italianos hubieran conseguido el tercer gol, a estas horas ya estaríamos rezando los madridistas.

Carlo Ancelotti será simpático, educado, y capaz de aunar voluntades en un equipo compuesto por no pocos egos, pero tácticamente es muy flojito. Por no decir que es incapaz de tomar las decisiones correctas antes del partido y sobre todo durante. Cierto es que a veces no le hace falta acertar en sus decisiones porque cuenta con Ronaldo, James, Bale... y algunos jugadores más capaces de ganar partidos. En el Juventus Stadium, sin embargo, no acudió nadie para auxiliarle.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comenta mis escritos ,pero desde el respeto.

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.